Con la finalidad de abordar la situación de la región para fomentar el reciclaje, la universidad abre la conversación en el marco de la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP).
Se trata del seminario “Ley REP 20.920: Avances y desafíos en la gestión de envases y embalajes domiciliarios”, organizado por el Centro de Evaluación y Certificación de Competencias Laborales (CECCL) de la Universidad Católica de Temuco, junto con la colaboración de la SEREMI del Medio Ambiente y Trabajo y Previsión Social de la región, sumado a la participación de la Asociación Nacional Recicladores de Chile (ANARCH), agrupaciones del gremio de Recicladores Base y entre otras instituciones.
La actividad abordó la Ley 20.920, una medida que obliga a los productores de productos prioritarios a asumir la responsabilidad de organizar y financiar la gestión de los residuos generados. Además, establece un Fondo para el Reciclaje que apoya proyectos municipales orientados a la prevención de residuos y al fomento de su reciclaje y valorización.
Félix Contreras, SEREMI de Medio Ambiente, destacó el rol de los recicladores de base, mencionando que estos actores son fundamentales para el cumplimiento de la Ley REP: “Cada año generamos cerca de 380 mil toneladas de residuos, lo que hace urgente adoptar un modelo de economía circular. Es importante que los productos puedan ser reciclados para reducir su impacto”.
Por parte de la Universidad Católica de Temuco, el Director de Vinculación, Enrique Riquelme, valoró el trabajo del CECCL para coordinar a los actores regionales y fortalecer las competencias internas en formación e investigación sobre la ley. “La universidad sigue apostando por la sostenibilidad y abre espacios de diálogo con los actores regionales”, afirmó.
En relación a la práctica de esta política pública, se incorpora la intervención de Alejandra Reuss, dirigente regional de la Zona Sur de ANARCH, compartiendo un llamado a cada municipio en el país.
“Para que puedan hacer mesas de trabajo y podamos ver quiénes están certificados y en cumplir lo que establece la ley, para trabajar y tener los pagos por servicios, la dignidad laboral, contratos de trabajo y apoyar a los recicladores como actores fundamentales”, resumió.
Gestión
Los detalles de los avances de la economía circular estuvieron a cargo del profesional de la SEREMI del Medio Ambiente, Paulo Roa, con el objetivo de plantear la necesidad de un residuo sanitario regional.
“Tenemos que analizar el contenido de la basura, en donde el 50% pertenece a materia orgánica. Por lo tanto, de 100 camiones que van al Bío Bío, 50 llevan materia orgánica. Además, existe un 27% de residuos de envase y embalaje que se traduce aproximadamente en 120 mil residuos al año”, dio a conocer.
Respecto a esta situación, el Director del Servicio de Cooperación Técnica (SERCOTEC), Cristian Epuin, señaló el compromiso del servicio para apoyar en el fortalecimiento de cooperativas.
“Con el respaldo de todos los actores, podemos convertir los residuos en una oportunidad de desarrollo para la región, mientras trabajamos en la creación de un centro de negocios para las cooperativas de la Araucanía, apoyando su crecimiento con más capacitación, fondos y alianzas estratégicas”, declaró.
En esta línea, Carik Pinto como Líder de Vinculación Territorial del GRANSIC ReSimple, presentó sobre la contribución para el reciclaje con el territorio desde la logística del financiamiento para la aplicación de la ley.
“Los productores deberán pagar una tarifa, la cual se compone por el peso y por materialidad, esta tarifa va a estar generando el financiamiento de la operación que llevará efecto el GRANSIC, quien pagará cada uno de los servicios que se generen para lograr que los materiales puedan ser valorizados”, explicó.
Por su parte, la intervención de GIRO Recicla estuvo a cargo de su Coordinador de Operaciones, Marcelo Mínguez, quien se refirió al compromiso del equipo por el cumplimiento de la ley con los municipios en la región Metropolitana.
Según sus registros compartidos, la recolección de puerta a puerta se encuentra en las comunas de Independencia, Peñalolén, Recoleta, Quinta Normal y Huechuraba, con 4 cooperativas de Recicladores Base (RB) y 12 RB independientes.
“En relación a las instalaciones de recepción y almacenamiento, se encuentran 3 puntos limpios en Peñalolén, en Recoleta y uno nuevo en Quinta Normal, donde todos se encuentran operados por recicladores base. Igualmente, queremos dar a conocer en el servicio de pretratamiento, se está operando con recicladores de base, con una capacidad de hasta 250 toneladas mensuales de envases livianos”, agregó.