Acompañada por autoridades y la comunidad universitaria, la nueva rectora reafirmó su compromiso con una universidad inclusiva y conectada con el territorio.
La Universidad Católica de Temuco escribió un nuevo capítulo en su historia institucional de más de 65 años. Con el nombramiento oficial de Marcela Momberg Alarcón como rectora, se marca el inicio de un período rectoral que se proyecta con un sello profundamente humano, regional e inclusivo.
Frente a una Aula Magna colmada por autoridades, estudiantes y académicos, Momberg asumió el liderazgo de una comunidad de la que forma parte hace ya tres décadas. Abogada de formación, con una destacada trayectoria académica y de gestión dentro de la propia universidad, es la segunda mujer en encabezar la rectoría.
“Asumo este desafío con mucha alegría, gratitud y humildad”, expresó en su primer discurso como máxima autoridad de la institución. Su mensaje fue claro: las personas están en el corazón del proyecto universitario. “Nuestra primera prioridad son siempre los estudiantes. Queremos formar personas íntegras, comprometidas con su entorno, y hacerlo en alianza con instituciones públicas y privadas, para así servir a la región y al país”, sostuvo.
Momberg conoce la UCT desde dentro. Ingresó como docente de la carrera de Derecho en 1996 y desde entonces ha liderado procesos clave como la acreditación institucional, la planificación estratégica, la implementación de políticas transversales y la creación de la Dirección de Género. Fue Secretaria Académica, Secretaria General y Prorrectora. En 2020, fue reconocida como una de las 100 mujeres líderes de La Araucanía. Hoy, su experiencia y compromiso la ponen al frente de la universidad.
El evento fue presidido por el Gran Canciller UCT, Monseñor Jorge Concha Cayuqueo, quien explicó el simbolismo de este nombramiento.“La nueva rectora es heredera de la historia de esta universidad, pero también representa una nueva sensibilidad: la de una mujer de esta tierra, con profundo conocimiento de su gente y sus desafíos. Su liderazgo será signo de esperanza para toda la comunidad”, afirmó.
Diferentes autoridades e intregrantes de la comunidad universitaria llegaron hasta el Aula Magna Monseñor Jorge Hourton para acompañar este importante hito, entre ellos, el Subsecretario de Educación Superior, Víctor Orellana, quien valoró el camino recorrido por la UCT en cuanto a inclusión y compromiso público: “Esta universidad ha demostrado que estudiantes de contextos vulnerables pueden ser profesionales exitosos y protagonistas del conocimiento. La rectora Momberg continuará y profundizará esa misión que la distingue a nivel nacional”, declaró.
Investidura y Profesión de Fe
La ceremonia de investidura, incluyó la Profesión de Fe entre el Gran Canciller y la nueva Rectora, seguida por la lectura y firma del acta oficial, en presencia del Secretario General de la institución, Alejandro Fernández, momentos que sellaron solemnemente el inicio del nuevo período.
En la ocasión, la rectora reconoció el legado del rector saliente, Aliro Bórquez Ramírez, quien lideró la UCT durante los últimos 12 años. Su gestión dejó una huella profunda en el fortalecimiento académico, la consolidación institucional y la sostenibilidad de la casa de estudios. El ahora exrector, expresó gratitud por estos años de trabajo colectivo, y sostuvo que entrega una “universidad fortalecida, con proyección y con una comunidad comprometida. Estoy convencido de que las capacidades que hemos construido permitirán seguir avanzando con solidez y visión de futuro”.
Al concluir la ceremonia, la nueva rectora proyectó con claridad el espíritu que marcará su rectorado, enfatizando que “iniciamos esta nueva etapa con la convicción de que el diálogo, la participación y el compromiso colectivo son las bases para seguir creciendo como institución. Nuestro desafío es avanzar con mirada regional, sin perder de vista que somos parte de una comunidad nacional que necesita universidades comprometidas con el bien común”.